La portavoz del movimiento político marroquí Justicia y Espiritualidad, Nadia Yassine indicó que la tranquilidad aparente acaso solo sea el silencio que precede a una tempestad como la que sacude al mundo árabe.
En entrevista con el diario español El País habló sobre la forma en que su país vive la situación de sus vecinos en el norte de África, afirmó que “la tranquilidad en Marruecos no es absoluta. Las reivindicaciones y las revueltas reprimidas salvajemente son frecuentes en Marruecos desde hace años”.
Yassine señaló que el “vuelco democrático se producirá por las buenas o por las malas” en Marruecos.
“Para el régimen marroquí ha llegado la hora de tirar a la basura la Constitución y de llevar a cabo una auténtica campaña de depuración de las redes de nepotismo para devolver al pueblo marroquí sus bienes expoliados”, dijo la dirigente del movimiento marroquí.
Yassine aseguró que hay factores que deben considerarse como similares a Túnez y Egipto, entre ellos el desempleo con una tasa del 20 por ciento, la caída de la emigración por dificultades para obtener visados y el auge de la islamofobia.
“La rapiña de los dirigentes adeptos del nepotismo, que favorece a su vez la corrupción desenfrenada. La humillación que padecen los ciudadanos, y segundo, la frustración provocada por ver a Occidente como Eldorado de libertad, dignidad y también de bienestar”, manifestó.
Yassine consideró que Europa no debe temer a las fuerzas islamistas en Túnez y Egipto, y tiene que “olvidarse del escenario de Irán satanizado”, y pensar más en el modelo de Turquía, ya que el tiempo hizo madurar a los movimientos en ambos países.
De su organización en Marruecos, aseguró que ha demostrado ponderación, no pretende alcanzar el poder, pero sí promueve el respeto de la soberanía popular, la separación de poderes, el multipartidismo y elecciones.
Yassine dijo estar preocupada por la defensa del derecho a ser musulmanes ante la islamofobia “de algunos discursos beligerantes”.
Fuente SPS
No hay comentarios:
Publicar un comentario